Ponecias de las Presentadoras

Muchas gracias a tod@s por su asistencia a la presentación de
Ellas / Nosotras Masiosare.
Esperamos que el evento les haya gustado tanto como a nosotras...
Aquí les proporcionamos las ponencias de nuestras presentadoras:

Odette Alonso

MASIOSARE EL HUMOR

Por tradición –cultivada por nosotras mismas o impuesta por los otros–, las lesbianas solemos ser (o parecer) un tanto hoscas. Aunque en los ambientes íntimos y amistosos, más en confianza, seamos unas desmadrosas contadoras de chistes y bailadoras de cumbias y merengues, en los ámbitos públicos muchas de nosotras solemos –insisto: solemos, no es una regla universal– ser vistas o dar la imagen de gente de pocas pulgas. Por la supuesta hombrunez pretendida o sugerida, por esos morbosos estereotipos que suelen colgarnos, o incluso por la seriedad con que, mujeres al fin y al cabo, ponemos en nuestros asuntos todos, pero especialmente en las cuestiones públicas o profesionales, a veces pareciera que inspiramos más miedo –o“respeto”– que los propios hombres.
A la desarticulación de argumentos como el anterior sirve Ellas/ Nosotras Masiosare. Heredera de la tradición de los cortometrajes documentales, inserta la ficción en ese tono del testimonio, pero inserta también, transgresores, el humor, el jugueteo, el desenfado, para contar historias que, de otro modo, podrían ser un poco ríspidas para cierto tipo de público.
A ello ayuda, definitivamente, la ausencia de diálogo hablado, explícito. El diálogo visual, empero, es tan acertado que los efectos buscados hacen diana en cada una de las secciones del video: la narración de anécdotas cotidianas de lesbianas, principiantes o experimentadas, muestra una variada gama de aspectos íntimos y públicos de su existencia y convivencia. Hay humor e intencionalidad lúdica en esa especie de celebración de las brujas del parque, en la imagen caricaturizada de la voladora y justiciera Superles, en la cámara rápida con que se matiza el robo de una novia en plena boda o los besos que no puede separar una miembro de la policía que finalmente acaba dejándose besar, en el ambiente estudiantil que rodea el proceso de enamoramiento maestra-alumna en la tortiescuela, y en los coros finales.
El efecto de estos coros es especialmente destacable, porque deja a la espectadora (or) con una sonrisa segura y la impresión de haber visto algo divertido, agradable. Y éste es, a mi entender, el gran acierto de Rotmi Enciso: transmitir el mensaje “serio” –cómo se enamoran, cómo viven, cómo luchan estas mujeres– con un tono sabroso, desencartonado, jodedor. Mucho más cuando Rotmi me ha dicho que su intención es que esta película trascienda las lindes exclusivas del sector lésbico y de la comunidad LGTB para ser apreciada por cualquier tipo público y llegar a cualquier entendimiento, literal o metafórico.
Y si ya es una osadía tomar este camino y andarlo públicamente con naturalidad, “porque nos da la gana”, hacerlo con humor es el toque de gracia, el golpe maestro.
Muchas gracias por ello, Rotmi, y muchas felicidades.

Odette Alonso Yodú
Ciudad de México, 29 de mayo de 2007.